Seguros para el coche

Los seguros del coche o vehículo habitual son clave para la seguridad en la conducción, además de ser obligatorios por Ley. El seguro de vehículos marca las condiciones en que la empresa de seguros abonará las indemnizaciones por daños directos o indirectos, causados o sufridos por un turismo mientras estaba circulando.

 

Hay que estipular lo que incluye muy claramente y tener pagado siempre al día el seguro del coche, para evitar situaciones muy desagradables y peligrosas.

 

Obligatoriedad del contrato o seguro de coche

A grandes rasgos, la diferencia en el importe entre compañías de seguros se plasma en la calidad de la cobertura y en las garantías contratadas por cada una de ellas. Las compañías más contrastadas del panorama español son también las que ofertan las pólizas más completas de seguros de coche. Cuanto menor sea la edad y la experiencia de los conductores más se incrementa la diferencia de precio entre hombres y mujeres, para el seguro del coche, pero decrece también el interés de las compañías aseguradoras en su contratación. Quitando y dejando de lado importes relativamente pequeños, de no más de 600 euros, y que sólo se pagan anualmente, lo normal es que la cantidad económica del seguro del coche se pueda fraccionar por trimestres o semestres en cada caso concreto. Por el contrario, la comodidad conlleva por su lado un incremento del precio total, en muchas ocasiones muy notable. Este es el caso que se presenta en compañías muy conocidas, que encarecen esos dispendios pecuniarios en un 25%, si se opta por contratar un pago trimestral o semestral, respectivamente.

 

En resumen, este tipo de contrato es de los más importantes, porque son obligatorios para cada vehículo de motor que circule a nombre de una persona y se tienen que pagar siempre en la fecha fijada, para evitar problemas muy graves en la circulación del tráfico rodado.